El 25 de septiembre, fuimos al centro de Madrid para ver qué ocurría por las Cortes con todo el tema del Rodeo al Congreso el 25-S. Llegamos como a las diez de la noche, fuimos a la plaza Canalejas y a la Glorieta de Neptuno. Todas las calles con Policías antidisturbios y un ambiente muy tenso. Según llegamos a Neptuno acababan de haber dado palos a diestro y siniestro. No estamos mucho tiempo en Madrid, ni conectados a la información constantemente, pero sí sabemos que hay miles de personas, posiblemente cientos de miles, y a lo mejor millones, bastante descontentos con los que llevan el carro. Políticos, y banqueros en general. Tras muchos años de tomadura de pelo, la gente se está dando cuenta de que los que están ahí arriba, no quieren nuestro bien, si no exprimirnos al máximo, y que los políticos, gobernantes y jueces están vendidos a las grandes mafias multinacionales, los bancos. La gente se va dando cuenta de que no existe la democracia, de que los diferentes partidos políticos son marionetas de los mismos amos, y que juegan a enfadarnos y darnos caramelitos para que votemos a otros diferentes y pensemos que somos libres para elegir y demócratas. La mejor excusa para las dictaduras de mercado, la democracia.


Así que la gente desesperada, en un país arruinado por banqueros estafadores y políticos ladrones y corruptos, con altas tasas de paro, se echa a la calle para reclamar y demostrar su inconformidad. Para decir que los que están en el Congreso, no quieren nuestro bien, son gente vendida, y no para nuestro beneficio como sociedad si no para sus intereses particulares.

 Y lo único que sale en la mayoría de la prensa y medios de comunicación es que ha habido hostias a diestro y siniestro, y que las masas querían tomar el congreso y acabar con estado democrático. Basura comeollas. Y así se disipa una vez más la voz del pueblo, entre golpes y mentiras. Yo no se quién convocó esas manifestaciones ni con qué intereses. Por ahí debe de haber muchas cosas que desconocemos y muchas personas que ni imaginamos detrás de las cortinas. Pero ví gente, seres humanos, pidiendo que por favor se les deje de robar y de engañar.

Posiblemente los que empezaron con los golpes y moviendo vallas estén pagados por los mismos que chupan de la gente. Si te quieres cargar una manifestación, una revolución pacífica o un grito de indignación popular en las calles, pon a unos cuantos con cara de violentos, que ataquen a unos policías y ya está la mecha prendida de la violencia. 

  Creo que hay que seguir dando la brasa en las calles, seguir poniendo en evidencia los políticos, y dar ideas, y activarse. O vivir en un Mundo paralelo autosuficiente y desobedecer a lo oficial, y tratar de vivir en paz. De  momento si la mayoría de la población vive en el umbral de la comodidad y quiere seguir con este sistema, y alimentándolo pues vale, para qué luchar contra algo que la mayoría quiere. Ahora sí, que nos dejen en paz, y no nos exijan que nos unamos a ellos. Que cada uno piense lo que quiera y que no caigamos de nuevo en dogmas.

  Nosotros estaremos en Australia (otro eclipse total de sol!) e India (enseñanzas del Dalai Lama), quería volver pronto para estar en el Camocho, pero ya que estaremos allí para llevar a un grupo, nos quedaremos tranquilamente un mes más, además de ser un paraíso, gastamos menos dinero allí que aquí.

  Unos días más para terminar el trabajo de pintores en casa de mi tío y buenos momentos con los lamas tibetanos que están afincados en mi casa durante este mes. De allá para acá, preparando el viaje en grupo a su monasterio de India y de nuevo en los campos extremeños desde los que escribo ahora este blog. Llegamos ayer a mediodía. Nos hemos venido unos días a desconectarnos del Matrix-Madrid, rebesar a las sobrinas, trepar unas pocas montañas buscando castros vettones y cazoletas neolíticas por los alrededores, y coger unas pocas piedras para repartir por Australia y la India. Todo el día de la Ceca a la Meca, parece inevitable.