Han pasado meses desde que escribimos el ultimo blog, el viaje ha sido tan largo y continuo, que lo hemos dejado un poco estancado, ayudó el que dejara de funcionar el ordenador con el  que escribíamos en el viaje, y en la India profunda no hay muchos ordenadores o van muy lentos. El movimiento continuo y el vivir día a día hace que escribir un blog sea a veces algo complicadísimo. Próximamente vamos a retornar al lugar donde lo dejamos, allá por el eclipse de Sol de Australia, hace ya varios meses, y también intentaremos que sean más frecuentes, con más fotos…¡y más cortos!

 Ahora, comienza la primavera, a 20 de marzo de este año 2013. Estamos con los Lamas tibetanos del monasterio de Ganden Shartse,  con los que llevamos 7 años trabajando.  Estarán viviendo con nosotros en nuestra casa, todo un privilegio compartir tantos momentos con estas personas de mente tan pura y sencilla. Estarán en diferentes lugares de Madrid haciendo rituales tibetanos, dando bendiciones y pujas, y pasando consultas de medicina tibetana con en Doctor Sherab Dorje.

 Las mayores lecciones que aprendemos de ellos es su manera de ser, su comportamiento y carácter, su manera de aceptar los cambios, su buen humor, su humildad y su fluidez ante la vida. Ellos no nos hablan de ascensiones, ni de la iluminación, ni de los rayos angélicos, ni de profecías, ni tan siquiera de chakras ni meditaciones, nos hablan de la vida misma, del ser compasivo, amable, humilde y cariñoso, bases de una autentica vida espiritual, lo demás lo dejan para los buscadores ansiosos de méritos espirituales que todavía no se han percatado que el mayor mérito es la bondad, la humildad y el auténtico conocimiento de la Unidad en todo.

 Hemos dado ya tres conferencias de medicina tibetana y ayurvédica, y continuamos con nuestras prácticas de masajes. Esperamos este verano saltar a nuestra querida isla de Ibiza, y llevar allí estos conocimientos que tanto bien han hecho a la humanidad.

Ahora estoy con mi abuelita en el hospital, tiene ya 95 años y acaba de coger una pulmonía, ya esta cansada de tantos años en este mundo. Cuantísimo tenemos que aprender de nuestros mayores y ancianos, con la humildad  que han vivido  y lo que han aguantado y lo bien que han llegado a la vejez, después de pasar guerras, postguerras y de todo en este siglo. Ahora nuestras generaciones, a pesar de que tenemos de todo no paramos de quejarnos, nos pensamos viejos en la treintena, nos pensamos en crisis cuando comemos y dormimos caliente todos los días, nos estresamos  por nada pero nos quejamos de todo, y estamos sin alegría ni ilusión, han hecho de nosotros unos piltrafas blandengues. Mis respetos a las generaciones de abuelos que tan fuertes son, y aun habiendo pasado mil calamidades han mirado con optimismo la vida, casi me parece que ahora los jóvenes somos más viejos de espíritu que ellos.

Algo tiene que cambiar para que despertemos de este insomnio en el que estamos, para que nuestro espíritu vuelva a rejuvenecer. A ver si esta primavera altera un poco la sangre de las gentes de nuestro país, y nos activamos y tomamos las riendas de nuestras vidas antes de que hagan de nosotros unos peleles asustados.

 Continuaremos próximamente con el blog que dejamos hace meses. Terminaremos con Australia y contaremos la aventura con un grupo de 15 personas en India, con las enseñanzas del Dalai Lama y acabaremos con los  cursos de terapias ayurvédicas que dimos en Kerala en Enero.